Oscuridad y claridad: obtén ambas según la confección de tu estor screen

La mayoría de los avances tecnológicos en el área de la decoración y el diseño de interiores, trae consigo la utilización de materiales y técnicas de confección de última generación. Nuevas texturas, tonalidades, variaciones del color, mecanismos, y muchas otras innovaciones, se presentan como alternativas que buscan resaltar y renovar el toque personal del cliente, sobre todo por el hecho de que el acceso a estas actualizaciones, ha dejado de ser cada vez menos exclusiva, y permite que cada individuo logre crear su propio estilo.

Para cada ambiente, se ofrece todo un abanico de posibilidades que trastocan y dan vida a los espacios: habitaciones, salones, cocinas, cuartos de baño, oficinas, salas de reuniones, entre otros. Una de las opciones más versátiles para la decoración son los estores screen, cuyas funcionalidades, en especial la variación lumínica, dan un toque verdaderamente personalizado, siempre y cuando el cliente tenga conocimiento y asesoría para explorarla al máximo.

Protección y variación lumínica de los estores screen

Esta característica de los estores screen viene determinada por el porcentaje de apertura, o la cantidad de agujeros que conforman el tejido durante su confección, lo que produce una armonización en la luz solar al incidir sobre el mismo. A este factor, también se le conoce como regulación de la radiación solar, pues determina el grado de protección de los rayos UV (ultravioletas) que ingresan al espacio. Lograr un equilibrio perfecto entre la visión interna y externa es una excelente opción para ambientes frescos y cómodos, adaptados a cualquier condición climática.

¿Cómo seleccionar el grado de apertura indicado?

Seleccionar el estor screen adecuado, implica conocer un poco más de cerca los grados de apertura que ofrecen para todos los gustos y exigencias, y en este caso, existen cinco (5) escalas o porcentajes a escoger para los clientes de este mercado: un grado de apertura de 10% ofrece un alto nivel de visibilidad en ambos sentidos, por ende, es el más traslucido.

En el caso de un 5%, se obtiene una excelente protección solar y visibilidad, sin riesgo a que se genere un deslumbramiento en el interior de la estancia, mientras que un grado del 3% aumenta la privacidad al tiempo que no opaca la visibilidad hacia el exterior.

Ahora bien, para una intimidad aún mayor, el 1% es el adecuado y disminuye enormemente la luz exterior, pero si lo que se busca es opacar completamente la incidencia lumínica, el 0% evita en un 100% el paso de luz natural. Sea cual sea el grado a escoger, lo más recomendable es recibir asesoría profesional para garantizar una satisfacción total.

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